Hace ya muchos años, en un parque de ciudad; se plantaron para su embellecimiento, una serie de palmeras de vistosa hechura.
De la mano de un jardinero, nunca les falto mimos y cuidados especiales; su proceso de crecimiento era de lo mas normal, altas, esbeltas etc. etc.; salvo una de ellas, que de manera extraña se atrasaba en altura y engordaba en exceso.
El resto de las palmeras se reían y siseaban al viento sobre su aspecto; al tiempo que arrojaban sobre ella, los restos de hojas secas.
Un día, el jardinero; bajo una maraña de ramas, descubrió algo maravilloso. El patito feo de las palmeras se había transformado en una talla; pues, aun siendo de la familia, no era una especie autóctona y siempre añoro con fuerza su querida tierra Papúa. Hoy en día, es la más querida y visitada del lugar.
Maravilloso! Cuando lo diferente se torna hermoso.
ResponderEliminarFeliz año Edward!!!
Marga
Genial historia ;)
ResponderEliminarTienes ojos en el cogote, yo hubiese sido incapaz de darme cuenta de su belleza.
Un abrazo enorme y feliz año
Ya lo decía Jorge Drexler: "nada se pierde, todo se transforma".
ResponderEliminarQue este año recién estrenado nos traiga buena fotografía y la capacidad de seguir disfrutando de ella, ... no te parece, Hedward????
Jejeje .......
Besotes!!
Por fín podemos disfrutar de esta entrada. Menuda expectación que has creado jaja
ResponderEliminarBonito lugar para ir a descansar, a leer, o a charlar un rato con el amigo de Papúa, que seguro tiene mil historias que contar de su tierra lejana.
Un abrazo y feliz 2011
Wonderful
ResponderEliminarshot
good
creations
Pues fue una idea genial,quedó de autentico lujo.
ResponderEliminarPreciosa escultura.
Besos
me gustan las hitorias que terminan bien...aunque tiene mala cara, si que es bonita.
ResponderEliminarMuy curiosa la historia y bonita fotografía, te deseo un feliz año 2011 saludos...
ResponderEliminarBonita história¡¡¡ Feliz 2011
ResponderEliminarBien definida esa idea y te dire que puede que alguien la crea.
ResponderEliminarFeliz año.
Me encantan las historias de patitos feos...siempre esconden historias interesantes que no todo el mundo es capaz de entender.
ResponderEliminarBesoT.
Una Historia preciosa, Edward. Así da gusto empezar el año.
ResponderEliminarFeliz 2011 y un fuerte abrazo
Me gusta cómo has construido la historia alrededor de la talla. Es muy bonita.
ResponderEliminarQue tengas un muy feliz 2011.
Un abrazo.
Bonita historia para cantar a la añoranza y a la tierra querida. En la diferencia está la belleza, a pesar de los pesares. Feliz año 2011 y que traigan lo mejor de lo posible...
ResponderEliminarSaludos
Mirar, imaginar, fotografiar y compartir... admiro tu capacidad para todo ello.
ResponderEliminarBesos y próspero 2011!!!
Bella historia y bella fotografía Edward.
ResponderEliminarSaludos!
Excelente.
ResponderEliminarQuero deixar-te um abraço e o desejo de um bom ano.
Saludos.
Nadie es profesta en su tierra...ni siquiera la palmera que tuvieron que venir los de fuera para descubrirla ante los ojos de sus compañeros... Bien vista!
ResponderEliminarEstupendo como siempre, tanto la combinación de la imagen, la música y el texto que lo acompaña. Quizá hasta mete un poco de miedo lo cual en estos momentos que corren no vienen nada mal. Un miedo sano, qué gusto. Abrazos,
ResponderEliminarSi no vales de palmera te toca de estatua, hay que fastidiarse. Felicidades.
ResponderEliminarMuy buena la foto!!, la verdad es que es muy muy original. El texto mejor aun!
ResponderEliminarBesos
¡¡Una palmera tuneada!! Qué cierto es eso de que quien ríe el último ríe mejor... Besos!
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